La batalla librada entre las dos bandas icono de los 90 tuvo su origen en la rivalidad entre los músicos, diferente a la de Beatles y Stones que fue un enfrentamiento más bien librado por el público.
Con el “boom” del brit pop, el mundo se había puesto a los pies de las dos formaciones. Oasis luchaban por no ser etiquetados con una etiqueta que les parecía pequeña para sus aspiraciones. Ellos querían ser la banda de rock más grande de todo el mundo, no sólo un tonto fenómeno salido de las islas. Luego estaba Blur, que tenían tanta confianza en quienes eran que les importaba bastante poco las etiquetas que les pusieran. ¿Qué pasó entonces? Pues que Liam Gallagher siempre ha sido un arrogante sin escrúpulos y Damon Albarn tiene un gen competitivo tan alto que hasta puede competir haber quién es más im...
Cuando la canción “Some might say” llegó al número uno de las listas, Oasis parecía destinado a ser la banda más importante del planeta. Albarn no tuvo reparos en ir a la fiesta de celebración por la hazaña. Sin embargo, cuando llegó, Liam Gallagher le abordó chulesco gritando “¡somos el número uno!”. Esto encendió el gen competitivo de Albarn que simplemente dijo, “pues a mí sólo me parecen Status Quo”. Ya se habían dado las bases para el enfrentamiento. Oasis llegaron a odiar realmente a Blur a partir de allí y Blur, que pensaban al principio que sólo era un juego, fueron arrastrados al barro.
El culmen de la guerra sucedió el 14 de agosto de 1995. La discográfica de Blur decidió mover el estreno de del primer single de su nuevo disco, “The great escape”, al mismo día que se publicaba el segundo single del segundo álbum de Oasis, “(What’s the story) Morning glory)”. La expectación era tan grande que salía en los periódicos de todo el mundo. En ese momento los rankings de ventas lo eran todo para las bandas. El 14 de agosto de 1995 Blur sacó "Country House" y la banda de Mánchester "Roll With It".
Quién resultaría ganador en la batalla de ventas era una cuestión que se volvió mediática y que incluso acaparó a los noticieros televisivos. Finalmente fue la banda liderada por Damon Albarn la que ganó en ventas, con 274.000 copias contra las 216.000 vendidas por Oasis.
Blur ganó la batalla, pero lo cierto es que el disco de Oasis arrasó al final en las listas y llegó a vender 21 millones de copias en todo el mundo. SIn embargo, “The great escape” no alcanzó las expectativas creadas con “Park-life” un año antes y el fenómeno del britpop empezó a apagarse. Sí, Blur y Oasis seguían odiándose, pero ahora no le importaba a nadie. El enfrentamiento quedó reducido a la nada cuando Noel Gallagher se atrevía a decir que esperaba que Damon Albarn cogiera el sida. Cuando llegas a esos extremos, el enfrentamiento deja de tener gracia.
Detrás de esta rivalidad se ponen en juego varias cuestiones que sí son inherentes a las bandas. Por un lado los orígenes: Oasis provenía de Manchester, representando en algún punto a la clase trabajadora, lo cual también daba cierto carácter a su música; mientras Blur venían del sur y en representación de una clase media. Las dos bandas se volvieron emblemas del britpop, que marcó los 90 con el auge de MTV y del formato CD. Aún así, entre las dos bandas se perciben muchas diferencias musicales. Más allá de estar en la misma línea, Blur tiene una inclinación más alternativa y Oasis refuerza su costado más melódico.